En un Dios que existe eternamente en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Jesucristo es el Unigénito del Padre, concebido del Espíritu Santo y nacido de la virgen María. Que fue crucificado, sepultado y resucitó de entre los muertos. Que ascendió al cielo y está hoy a la diestra del Padre como nuestro Intercesor.
Que todos hemos pecado y estamos destituidos de la Gloria de Dios; y que el arrepentimiento es ordenado por Dios para todos y es necesario para el perdón de los pecados.
Que la justificación, la regeneración y el nuevo nacimiento se efectúan por fe en la sangre de Jesucristo.
En la santificación, subsecuente al nuevo nacimiento, por fe en la sangre de Jesucristo, por medio de la Palabra y por el Espíritu Santo.
Que la santidad es la norma de vida, de Dios, para su pueblo.
En el bautismo con el Espíritu Santo, subsecuente a la limpieza del corazón.
En hablar en otras lenguas, como el Espíritu dirija a la persona, lo cual es evidencia inicial de dicho bautismo.
En el bautismo en agua por inmersión, y que todos los que se arrepienten deben ser bautizados en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Que la santidad divina es provista para todos en la expiación.
En la cena del Señor y el lavatorio de los pies, aunque el ultimo punto no lo practicamos en nuestra iglesia local, pero es parte del Credo de la Iglesia de Dios.
En la premilenial segunda venida de Cristo. Primero, para resucitar a los justos muertos y arrebatar a los santos vivos hacia El en el aire. Segundo, para reinar en la tierra mil años.
En la resurrección corporal, vida eternal para los justos y castigo eterno para los inicuos.
Principios Doctrinales
Arrepentimiento: Marcos 1:15; Lucas 13:3; Hs 3:19
Justificación: Romanos 5:1; Tito 3:7
Regeneración: Tito 3:5
Nuevo Nacimiento: Juan 3:3; 1 Pedro 1:23; 1 Juan 3:9
Santificación luego de la justificación: Romanos 5:2; 1 Corintios 1:30; 1 Tesalonicenses 4:3; Hebreos 13:12Santidad: Lucas 1:75; 1 Tesalonicenses 4:7; Hebreos 12:14
Bautismo en agua: Mateo 28:19; Marcos 1:9,10; Juan 3:22,23; Hs 8:36,38
Bautismo en el Espíritu Santo subsecuente a la limpieza; el impartimiento de poder para el servicio: Mateo 3:11; Lucas 24:49,53; Hs 1:4-8
Hablar en lenguas como el Espíritu dirija a la persona, como evidencia inicial del bautismo en el Espíritu Santo: Juan 15:26; Hs 2:4; 10:44-46; 19:1-7
La iglesia: Exodo 19:5,6; Salmos 22:22; Mateo 16:13-19; 20; Hs 1:8; 2:42-47; 7:38; 20:28; Romanos 8:14-17
Dones espirituales: 1 Corintios 12:1,7,10,28,31; 14:1
Las señales siguen a los creyentes: Marcos 16:17-20; Romanos 15:18,19; Hebreos 2:4
El fruto del Espíritu: Romanos 6:22; Gálatas 5:22,23; Efesios 5:9
Sanidad divina provista para todos en la expiación: Salmos 103:3; Isaías 53:4,5; Mateo 8:17; Santiago 5:14-16; 1 Pedro 2:24
La cena del Señor: Lucas 22:17-20; 1 Corintios 11:23-26
Lavatorio de los pies de los santos: Juan 13:4-17; 1 Timoteo 5:9-10
Diezmos y ofrendas: Génesis 14:18-20; 28:20-22; Malaquías 3:10
Restitución donde sea possible: Mateo 3:8; Lucas 19:8,9
La premilenial segunda venida de Jesús. Primero para rescatar a los santos que han muerto y levantar a los creyentes vivos, hacia Él, en el aire: 1 Corintios 15:52; 1 Tesalonicenses 4:15-17; 2 Tesalonicenses 2:1. Segundo, para reinar sobre la tierra por mil años: Zacarías 14:4; 1 Tesalonicenses 4:14; 2 Tesalonicenses 1:7-10; Judas v. 14 y 15; Apocalipsis 5:10; 19:11-21; 20:4-6
Resurrección: Juan 5:28,29; Hs 24:15; Apocalipsis 20:5-6
Vida eterna para los justos: Mateo 25:46; Lucas 18:30; Juan 10:28; Romanos 6:22; 1 Juan 5:11-13
Castigo eterno para los inicuos, sin liberación ni aniquilación: Mateo 25:41-46; Marcos 3:29; 2 Tesalonicenses 1:8,9; Apocalipsis 20:10-15; 21:8